18 de enero de 2011

Los arruina conciertos


Hay personas que somos muy adictas a los conciertos, no nos gusta perdernos ni uno solo, si nos ligáramos a alguien en un bar y nos preguntara ¿A qué lugares vas seguido?, en vez de contestar "Al Classico" diríamos "Ups, me la vivo en conciertos", y es que la adicción a los conciertos es un mal que conlleva serias obsesiones, profesamos un rito en donde nada puede faltar para que cada concierto sea espectacular y salgamos diciendo "Ufff, qué conciertón".

¿Qué sería lo peor que nos podría pasar a nosotros los adictos? El típico personaje arruina eventos. Esa persona pesadilla que "sin querer" es molesto al grado de querer matarlo. He aquí los molestos de los molestos:

Britney de Iztapalapa
La típica vieja que cree saber todas las letras (ni sabe inglés) y las grita apasionadamente: "wachinfoooooor oooh my love pleaseeee yesss", lo peor de todo es que pareciera que lo hace a propósito en tu oreja. Huye de estas, en algún punto de la noche podría sacar el "body fresh" y ponérselo al lado tuyo.

Los carga novias
Son un verdadero abuso los tipos que cargan a su novia durante todo el concierto. `Oye hermano´ ¿se te olvida que hay gente atrás de ti? No dejan ver nada, y para colmo la novia baila y levanta los brazos estando allá arriba. A estos hay que aventarles vasos definitivamente y sin piedad.

Hippie oloroso
Una cosa es no bañarse y otra que huelas a axila en medio de un concierto, éste es el típico chaparrito oloroso que va con los brazos levantados recorriendo el lugar y dejando un caminito de olor que hasta te irrita los ojos. De este no tendrás que huir, va como alma en pena de esquina en esquina del concierto. Sólo lo sufrirás por unos segundos.

Flaco sin playera
Jurarías que trabaja de roadie, pero no, es el descarado que se quita la playera porque se le da la gana, y lo peor de todo es que suda como si hubiera corrido un maratón. Si está al lado tuyo, esquivarás su sudor toda la noche, porque suele aventarse y moverse mucho. Huye. 

Gordito sudoroso                                                                                                    Es aquel compadre que abarca la mitad del espacio donde estás, no te deja bailar, ni moverte, grita, brinca y para colmo suda como si estuviera en un sauna.                                                       

Mamey con Iphone
Éste es el “dude” que se viste con playera de lycra, está bien mamey y le gusta grabar absolutamente todo el concierto, ¿para enseñárselo a su abuelito? Quién sabe, pero toda la noche estará con los brazos estirados filmando. Lo peor es que no podrás armársela de pedo porque te mete una buena madrina.

Enamorado gritòn                                                                                             Esta chica(o) transmitirá todo el concierto a su enamorado, puede ser que grite cosas como "escucha, escucha, te amoooo" o cante las rolas mientras ondea su celular. Suelen ser muy molestas(os) cuando tú estás de grinch de las relaciones.

Camionera abusiva                                                                                             Es la típica gordita con aspecto de hombre que abusa de las chaparritas, si estás a su lado y siente en algún punto que le estás robando su espacio, te dará codazos, se recargará en ti, y si anda muy ruda, puede ser que hasta el slam organice con tal que sacarte de ahí. Huye.

Borracho mala copa                                                                                            Este brother se bebió toda la cantina antes de llegar al concierto, está ahogado, ya perdió el equilibrio, y se encima en ti, puede gritar cosas como "prépale puuu..." y obvio abuchea a la banda abridora y si estás con tu novia puede que hasta mano le meta, huye.

Fresa poser                                                                                                           Este es de los personajes más odiados por todos, la banda fresa que va a conciertos de djs o grupos que ni conocen, pero como está de moda van, no tienen ningún tipo de respeto por nada, platican durante el concierto, le dan la espalda al escenario y preguntan: ¿Por qué venden sólo chelas, no hay bacacho papirrin? Huye.

Gritona                                                                                                                  Estas fans tal vez no sean mayores de edad, y la excitación de la pubertad las haga gritar más que una sirena policíaca. Son muy molestas ya que gritan entre ellas, le gritan al artista, gritan por cualquier cosa. Es probable que hasta carteles traigan para demostrar su fanatismo.

Pacheco-inconsiente                                                                                             Este ente social ingiere estupefacientes en todo concierto, por lo que no está consciente de lo que sucede, sólo siente la música, está completamente ido y baila con la cabeza agachada. Lo molesto es que choca contra ti constantemente y cuando reacciona grita y levanta los brazos "para sentir la vibra".

Avienta chelas                                                                                                     Este ñerín es una de las peores pesadillas, le vale el concierto y no tiene educación en lo absoluto, su perfil de huelguista lo hace reaccionar de manera animal, avienta chelas, reclama el volumen y avanza por el medio de todos hasta llegar adelante. Huye. Podrías salir empapado y no precisamente de cerveza. IUGGGG!

Sabelotodo                                                                                                         Este melómano poseído en el cuerpo de un nerd es castroso como pocos, cree saberlo todo y ha visto a todas las bandas anteriormente. En vez de disfrutar el concierto va como critico a decir: "Sonaban mejor en 2005".

Perros inseparables                                                                                           La escena de dos perros haciéndolo es menos desagradable que este par. Van a besarse apasionadamente durante todo el concierto, no hay manera de despegarlos, lo peor es que sus besos suenan con todo y el escándalo del evento. Los odias porque no te dejaron concentrarte en ningún momento y porque dan asco.

Beatle terapia



¿Qué recuerdo tienen de los Beatles? Es la pregunta que ha formulado la psicóloga británica Catriona Morrison, de la Universidad de Leeds, en una macroencuesta online. Analizando las primeras 3.000 respuestas, procedentes de sujetos de edades comprendidas entre 17 y 87 años y residentes en 69 países diferentes, no deja lugar a dudas: los cuatro músicos están grabados en la memoria de millones de personas. Los detalles del estudio han sido presentado en el Festival de Ciencia , que se celebra estos días en Liverpool, cuna del grupo británico.

"Desde hace tiempo sabemos que la música puede ayudarlos a recordar episodios de nuestra vida, pero esta es la primera vez que lo demostramos con datos reales”, afirma Morrison, que mantiene la encuesta activa en la web Magical Memory Tour.






Según la investigadora, al comenzar la adolescencia escogemos nuestras preferencias musicales, pero “a partir de los 14 años la mayoría de la gente ya tiene su mente formada, y es en ese momentocuando la música deja una huella más intensa en nosotros”. De hecho, en la mayoría de los recuerdos asociados a las canciones de los Beatles, los encuestados son capaces de evocar sonidos, imágenes nítidas e incluso olores. La canción que más recuerdos despierta es She Loves You, seguida de I Want to Hold Your Hand.

Morrison y sus colegas están convencidos de que entendiendo cómo funciona nuestra memoria autobiográfica podremos enfrentarnos mejor a muchas de las enfermedades que trastornan nuestra capacidad de recordar. “Hace falta más investigación rigurosa sobre el vínculo entre música y memoria”, concluyen.


13 de enero de 2011

105 años de un tour mágico y misterioso


Ya hace ¡105 años! nació el hombre que inadvertidamente abriría las puertas de la percepción para millones de personas en el mundo.
Albert Hoffman fue un científico suizo. Estudió en la Universidad de Zurich y su más grande descubrimiento fue la síntesis del acido lisérgico dietilamina 25 conocido popularmente como LSD.
Hoffman estuvo estudiando las sustancias psicoactivas de los hongos mazatecos mexicanos (y otras plantas), lo cual lo llevó a sintetizar su sustancia activa, la psilocibina. El científico impulsó su uso en psicoterapia, puesto que pensaba que era “medicina para el alma”. Estuvo usándolo en pacientes con diversos trastornos psicológicos durante 10 años con gran éxito. Siempre se quejó de que la cultura hippie hizo un mal uso de su descubrimiento.
Fue el 19 de abril de 1943 cuando Hoffman decidió probar su propio descubrimiento para descubrir los efectos que tendría. Una hora después de haber consumido alrededor de 250 microgramos comenzó a experimentar euforia y cambios en su percepción. Su asistente lo llevó a su casa, pero por encontrarse en guerra, el uso de autos estaba prohibido, así que tuvieron que viajar en bicicleta. En el camino, Hoffman literalmente se malviajó y pensaba que su vecino era un ser maléfico que quería hacerle daño. Una vez en casa se tranquilizó y comenzó a ver colores de una brillantez nunca antes vista, figuras a manera de caleidoscopio que se abrían, cerraban y explotaban en fuentes de mil colores. Ese evento se conoce entre los usuarios del LSD como el “Bicycle Day”.
Es cierto que si bien muchas de las drogas traen más males que beneficios, también es cierto que las drogas han sido un elemento importante de la creación artística, no solamente en el rock sino en todos los ámbitos y en todas las eras de la humanidad.
Sin el LSD no habríamos tenido nada de la música y creaciones de artistas como losGrateful Dead, Jefferson Airplane, Jimi Hendrix, The Doors, Pink Floyd, Hawkwind, y sin él los Beatles se habrían quedado haciendo canciones poperas para adolescentes gritonas.
Sin duda el rock le debe mucho de su quehacer a Albert Hoffman.
Les dejó esta gran canción envuelta en ácido. Lucy in the Sky with Diamonds.

9 de enero de 2011

Tron Legacy


Antes de empezar este comentario hay que dejar algo bien claro: si alguna vez ha existido una película que merecía ser vista en tres dimensiones y en formato Imax, esta es, sin lugar a dudas, Tron: Legacy.
Porque el asalto a los sentidos que representa la experiencia de ver esta continuación de Tron en tales formatos deja, en pocas palabras, con la boca abierta.
Visualmente, Tron: Legacy es un festín, una orgía de imágenes, escenarios, movimientos de cámara y diseños que confirman que su director, el debutante Joseph Kosinski, es alguien a tener en cuenta en el futuro del cine en general y del cine fantástico en particular.
Y auditivamente, la cinta es una sensacional amalgama de sonidos, desde los efectos que surgen de las cuatro esquinas del cine (y también de su techo), hasta su extraordinaria banda sonora, escrita por el dúo de música electrónica francés Daft Punk.
Tron, la película original, se estrenó en 1982, el mismo año en que llegaron a las salas clásicos del género como Blade Runner y E.T. The Extra-Terrestrial.
Al igual que la primera, Tron no logró el éxito comercial que sus responsables deseaban. Pero el paso del tiempo la convirtió en un filme de culto, más que nada por ser el primer largometraje creado por computadora.
Como película dramática, Tron es absolutamente olvidable y mediocre.
Tron: Legacy no representa una revolución tecnológica al mismo nivel. Pero sí es, por un lado, una evolución visual de títulos más recientes como la trilogía The Matrix, y por otro, una considerable mejora con respecto al título original.